Abrir las puertas de un espacio emblemático de Barcelona a turistas de todas las condiciones mediante la tecnología. Este es el reto que se marcó el Park Güell, que recibe miles de visitantes al año y que quiere hacer que su estancia sea tan cómoda como sea posible.
Todo surge por un reto de innovación que lanza el Ayuntamiento de Barcelona a diferentes entidades. El concurso lo acaba ganando una aplicación de diversidad funcional del Park Güell, que ha puesto en marcha como prueba piloto el proyecto App Accessible.
Esta herramienta facilita la visita a los diferentes puntos de interés del parque sea cuál sea la condición del visitante. Todo el mundo puede utilizar esta aplicación, pero está especialmente adaptada a personas con necesidades especiales, ya sean físicas, pues ofrece información que facilita la movilidad, cognitivas, con la centralización de contenidos de lectura fácil, o fisiológicas, con herramientas para personas que tengan condicionantes visuales o auditivos.
Se trata de una tecnología que ha sido desarrollada junto con la Red de Accesibilidad y Vida Independiente (XAVI, por sus siglas en catalán). La colaboración ha permitido definir personas con necesidades diversas para crear hasta doce perfiles, con lo que la aplicación encaja en muchas situaciones.
Tecnología al servicio de la diversidad
En tan solo siete meses tras la puesta en marcha ha habido más de treinta mil descargas. La versión de la aplicación que más salida ha tenido ha sido la genérica, aunque también se han utilizado mucho las opciones de lectura fácil, el mapa adaptado, los audios y la ruta de movilidad.
Con estos datos, el Park Güell está analizando cuáles son las frecuencias de uso de las diferentes categorías para ver cómo se puede mejorar la herramienta y si se puede añadir algo más que aporte un valor que suponga una diferenciación respecto a otras entidades.
El objetivo es aprender de esta prueba piloto e incorporar las funcionalidades y mejoras que sean necesarias para que esta tecnología se convierta en una característica propia del Park Güell.
El eje de la accesibilidad es fundamental para esta entidad, porque creen que para que los visitantes puedan disfrutar de este espacio hay que prever recorridos accesibles, no solo en las visitas guiadas, sino en un formato digital que dé autonomía a todo el mundo.
En la entidad están muy orgullosos de esta iniciativa, por una parte, porque es innovadora y abre un nuevo campo de posibilidades, y, por la otra, porque los hace partícipes de una sensibilidad especial hacia muchos colectivos.
En este proceso Biosphere tiene mucho que ver, ya que obtener el sello les da confianza y les hace pertenecer a una red que trabaja para la sostenibilidad social. Así, la propia certificación ha dado pie a hacer difusión de estos proyectos. Y no deja de ser una publicidad que los beneficia.
De cara al futuro, ya se plantean nuevas iniciativas. A medio o a largo plazo quieren incluir más posibilidades que favorezcan la visita de las personas con necesidades especiales.
Una de ellas está en la Casa Museo Gaudí, que ahora gestionará también el Park Güell, donde quieren incluir experiencias inmersivas sensoriales enfocadas a mejorar la visita independientemente de la condición de los visitantes.
La evolución en la accesibilidad, una vez puesta en marcha, ya no se detiene.
