A poco más de treinta kilómetros de Barcelona, en la comarca del Vallès Oriental, Caldes de Montbui se sitúa como un destino turístico que combina encanto histórico, bienestar termal y un compromiso innegable con la sostenibilidad. Con una filosofía arraigada en la preservación del entorno y la satisfacción del visitante, este pintoresco municipio ofrece una experiencia única que cautiva a todo el mundo que la descubre.
Sumergirse en la cultura termal
La primera parada obligada en Caldes de Montbui es Thermalia, en la céntrica plaza de la Font del Lleó. Este espacio emblemático fusiona historia, cultura y bienestar y es a la vez museo y oficina de turismo. Thermalia invita a los visitantes a sumergirse en el mundo del termalismo de una manera seductora e interactiva, con un recorrido lleno de curiosidades que va desde la Edad Antigua hasta la actualidad. Es importante notar que los espacios expositivos cumplen criterios de accesibilidad.
En el museo también tiene cabida el arte: recorre la vida y obra de Manolo Hugué, muy vinculado con la villa termal, destaca su amistad con Picasso y ofrece una amplia colección de piezas y objetos personales de ambos artistas.
Por su parte, en la Oficina de Turismo del Ayuntamiento de Caldes, recibirás toda la información que necesitas para exprimir al máximo tu visita a la población. La oficina cuenta con el sello Biosphere, y a la hora de poner al alcance de los visitantes productos y servicios turísticos tiene en cuenta que sean sostenibles. Así, te podrá recomendar alojamientos con sensibilidad ambiental y social, hoteles con certificaciones reconocidas, visitas guiadas al centro histórico respetuosas con el entorno, restaurantes y medios de transporte sostenibles, entre otros servicios.
Además, en la tienda del museo-oficina de turismo encontrarás artículos de promoción comercial de producción local, bajo impacto ambiental y relacionados con la cultura y patrimonio del municipio.
El pueblo que hierve
Caldes de Montbui, con el apodo de “el pueblo que hierve”, es uno de los destinos termales más importantes de Cataluña y posee las termas romanas mejor conservadas de la Península, que pueden visitarse. Tampoco te puedes perder la Font del Lleó, de donde brota agua a 74 °C, y los lavaderos termales de la Canaleta y la Portalera, aún en funcionamiento.
La visita no estaría completa sin disfrutar de los beneficios terapéuticos de las aguas mineromedicinales en los diversos balnearios de la población y los baños termales públicos El Safareig.
El segundo sábado de julio se celebra Escaldàrium, una fiesta única en la que el fuego, el agua y la música en directo narran la leyenda del origen del agua termal ofreciendo un espectáculo lleno de baile, ritmo y euforia colectiva realmente impresionante.
Patrimonio, naturaleza y gastronomía por descubrir
Caldes de Montbui también es un tesoro histórico que te transporta al pasado y está lleno de rincones singulares para admirar, como la muralla medieval, el puente románico, el Museo Delger y la farmacia Codina, del siglo XIX y que conserva la decoración modernista.
Rodeado de naturaleza, este destino ofrece varias rutas de senderismo para todos los niveles y todos los gustos. Son ejemplos de ello la visita al yacimiento arqueológico de la Torre Roja, con restos de un poblado íbero y unas vistas increíbles; o al pueblecito de menos de diez habitantes de Sant Sebastià de Montmajor, un remanso de paz rodeado por montañas donde encontrarás una bellísima y perfectamente conservada iglesia románica.
La gastronomía local refleja la tradición catalana rural y se basa en productos de la comarca como embutidos, pasta, requesón, cerezas y licores típicos, que se pueden saborear en los restaurantes de la ciudad, tiendas de productos locales o los eventos gastronómicos que se celebran a lo largo del año.
Un destino comprometido con la sostenibilidad
A todos estos atractivos se suma el hecho de que Caldes de Montbui es un destino sostenible, certificada por el sello Biosphere desde el 2017. A través de su política de turismo responsable, el Ayuntamiento aboga por la mejora continua en la gestión sostenible de los ámbitos social, económico y ambiental.
En este sentido, promueven, entre otros, la formación y sensibilización del personal en los principios del turismo responsable y siguen criterios de sostenibilidad y eficiencia en el uso de recursos. Esto se materializa en medidas concretas como la instalación de paneles solares en equipamientos públicos y la puesta en marcha de puntos de recarga gratuita para vehículos eléctricos, junto con iniciativas de inclusión social.
Como ves, Caldes de Montbui es un destino turístico que va más allá de ofrecer simples vacaciones, con un enfoque que equilibra el disfrute del visitante con el desarrollo responsable. Si quieres una experiencia enriquecedora y sostenible, no busques más, Caldes de Montbui te espera con los brazos abiertos y los baños a punto.
