En pleno corazón de Barcelona, el Palau de la Música Catalana es mucho más que un icono de la arquitectura modernista. Este equipamiento centenario, declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO, se ha convertido también en un ejemplo de cómo una institución cultural puede impulsar el cambio social desde un firme compromiso con la cultura y las personas.
Desde su fundación en 1905, el proyecto ha estado guiado por los valores de la participación, la catalanidad y el compromiso social. Hoy, estos principios toman forma en diversas iniciativas que buscan acercar la cultura a todos, promover la cohesión comunitaria y minimizar el impacto ambiental. La Fundació Orfeó Català-Palau de la Música Catalana impulsa una labor ejemplar que combina excelencia artística con responsabilidad social y ambiental.
Música que transforma vidas
Una de las iniciativas más relevantes del Palau de la Música es Palau Vincles, su proyecto social más emblemático. Nacido en 2011 con el apoyo de la Escola Coral del Orfeó Català, tiene por objetivo promover la inclusión a través del canto coral entre niños y jóvenes en situaciones de vulnerabilidad. Actualmente, más de 600 participantes forman parte de los coros activos que se reúnen cada semana, y cerca de un millar participan a través de colaboraciones con corales invitadas.
El punto culminante del curso es el Palau Vincles Fest, un concierto abierto a las familias que muestra el fruto de meses de trabajo. La edición de este año ha destacado por el estreno de la pieza Mou el món, creada por Judit y Meritxell Neddermann, y por el estreno de las canciones ganadoras del concurso de composición del proyecto, que ya ha llegado a su cuarta edición. Con estas propuestas, el Palau demuestra que la música es una herramienta potente para fomentar la autoestima, la convivencia y la expresión emocional.
Un Palau para todos
La inclusión social está también presente a través del programa Apropa Cultura, que conecta equipamientos culturales con colectivos en riesgo de exclusión. Durante la última temporada, el Palau de la Música acogió a más de 1400 personas en conciertos y visitas guiadas en el marco de este programa. Se trata de un paso más hacia la democratización de la cultura para garantizar el derecho de todos a disfrutar y ser partícipes de ella.
Cultura con conciencia ambiental
El Palau de la Música Catalana integra la sostenibilidad como eje transversal de su gestión. En junio de 2025 ha puesto en marcha una nueva instalación de placas solares que generarán más de 43 000 kWh anuales de energía limpia para cubrir parte de su consumo eléctrico con recursos propios. El resto, un 93 %, procede de fuentes renovables a través del contrato de energía verde.
Este compromiso ambiental se enmarca en una gestión responsable que tiene en cuenta la sostenibilidad económica, social, laboral y de buen gobierno, velando por el equilibrio con todos los grupos de interés que forman parte del proyecto.
Un modelo de futuro
El Palau de la Música Catalana es hoy un modelo a seguir en el sector cultural. Con una programación artística que apuesta por la excelencia, la innovación y el talento local, y con iniciativas sociales y ambientales de gran impacto, la institución reafirma su voluntad de mejorar la vida de las personas. Un espacio donde la música no solo se escucha; se vive, se comparte y transforma la realidad que nos rodea.