El Ayuntamiento de Barcelona ha presentado la Medida de gobierno para la gestión turística 2024-2027, que tiene como objetivo mejorar el equilibrio entre el turismo y la vida cotidiana de las personas residentes y consolidar la ciudad como referente en la gestión, la ordenación, la financiación y el retorno social de este sector. Con un presupuesto de 254,7 millones de euros que se invertirán hasta 2027, la iniciativa incluye 55 acciones en 12 ámbitos de gestión, como el alojamiento, la oferta turística, la sostenibilidad y el desarrollo y retorno económicos.
Uno de los proyectos más destacados es Zona Bus 4.0, que busca limitar las paradas y estacionamientos de los autocares turísticos para reducir su impacto en determinadas zonas de la ciudad. Como parte de la nueva medida, estos vehículos pagarán más por aparcar en Barcelona.
La medida también sirve para blindar el Plan de gestión de los espacios de gran afluencia (EGA), que se ha puesto en marcha este verano. Por primera vez, este plan integra la gestión turística en un único modelo de ciudad que tiene en cuenta todos los aspectos relacionados con la economía del visitante, la cual, con un 13,9 % del PIB y 150.000 personas ocupadas, es uno de los pilares fundamentales de la dinamización económica de Barcelona.
Además, se reforzará la lucha contra los alojamientos turísticos ilegales y se impulsará la creación de un fondo de retorno ciudadano del turismo (Fondo ReCiutaT) y de una red internacional de destinos urbanos. Todo esto se realizará con el foco puesto en el turismo sostenible y responsable y en la mejora de la actividad turística, especialmente para favorecer su encaje en la ciudad.
