En el 12.º Congreso Mundial de Turismo de Nieve, Montaña y Bienestar, celebrado el pasado marzo en Andorra, se subrayaron las ventajas que puede suponer para el sector ofrecer experiencias más diversas e invertir en personas con talento.
Además, se identificaron los retos fundamentales a los que se enfrenta este tipo de turismo, entre los que se encuentran el cambio climático y la evolución de las tendencias de consumo.
También se destacó el papel que el turismo puede desempeñar en la protección de los ecosistemas de montaña vulnerables y en el aumento de la resiliencia de las comunidades que habitan en estos entornos, además de preservar el patrimonio local.
El Congreso se enmarcó en el Quinquenio de Acción para el Desarrollo de las Regiones de Montaña de las Naciones Unidas y, este año, se centró en el turismo de salud y bienestar.
Por otra parte, el encuentro también giró en torno a la promoción de los segmentos premium en zonas de montaña, los productos turísticos emergentes y la atracción y retención de personas con talento.
En el programa asimismo figuraban temas como la importancia de medir el flujo de visitantes a las montañas, lo que representa el paso fundamental para aprovechar al máximo el potencial del sector.
Un recurso para el territorio
Los representantes que acudieron al Congreso resaltaron la importancia que las actividades turísticas tienen para las regiones de montaña. Así, desde el Gobierno de Andorra aseguraron que el turismo en el país había recuperado las cifras prepandemia, con más de nueve millones de turistas y doce millones de pernoctaciones en 2023.
Por otra parte, hicieron hincapié en la importancia de buscar el equilibrio que asegure la continuidad ambiental y el bienestar de la gente, avanzando hacia un modelo basado en la sostenibilidad. De esta manera, se quiere evitar que el turismo sea percibido como un problema y se incluya dentro de las soluciones a los grandes retos de futuro.
Al mismo tiempo, desde ONU Turismo recordaron que el turismo es un recurso muy valioso para las comunidades de montaña y que, a su vez, puede desempeñar un papel vital para proteger estos ecosistemas tan importantes y ofrecer oportunidades para la conservación y el desarrollo de las comunidades locales.
La reunión también incluyó la celebración de un panel de alto nivel sobre políticas para el desarrollo del turismo de montaña. Aquí se debatió sobre cómo elaborar políticas que promocionen la innovación, diversificación y sostenibilidad de los destinos de montaña.
En esta edición, además, se incluyó una sesión sobre turismo de salud (sanitario y de bienestar), un segmento en el que las zonas de montaña pueden proporcionar un valor añadido fundamental y tienen una ventaja competitiva.
Esto muestra la transición que se está produciendo para diversificar los productos turísticos de estos territorios, con el fin de crear demanda durante todo el año y satisfacer las necesidades de los turistas actualmente.
El Congreso recordó que el turismo puede ser un motor de desarrollo rural y ayudar a promover la mejora y preservación de las culturas locales y los valores de las comunidades de montaña.